Feliz Navidad

A los que estáis lejos de la familia, a los que tienen el corazón dividido entre varios países, a los que creen en la magia y a los que la cordura les impide ser realistas. A los que están tan locos que creen que pueden cambiar al mundo (y lo hacen) y a los que sonríen a extraños por la calle…

Que el próximo año que inicia, no hayan más personas que pierden su vida en el Mediterráneo (ni en ningún lugar) por huir de las guerras, que ninguna familia se deba separar para intentar tener un futuro con esperanzas, que los muros de la vergüenza se conviertan en puertas abiertas. Que ningún migrante sea tratado como delincuente.

Que nadie se quede sin atención médica porque su tarjeta de crédito no tiene suficiente saldo, porque habrá sanidad pública y gratuita para todos. Que ninguna niña del mundo se quede sin ir a la escuela por desigualdad de género, que ninguna persona mayor envejezca teniendo como única compañera la soledad. Que ningún ser humano sea discriminado por su idioma, religión, color de piel, género, situación social o económica, raza, ideología política, orientación sexual o nacionalidad.

Que todos los jóvenes tengan acceso a una educación pública, gratuita y de calidad. Y que nadie se vea forzado a emigrar. Que no haya ni una sola muerte más por violencia de género. Que cada mujer pueda decidir cuándo y cómo ser madre, y si quiere serlo.

Que no hayan más «sin hogares» y que los que trabajan extenuantes horas por un salario de subsistencia no sigan siendo pobres. Que ningún menor deba ir a la escuela sin antes poder tomar un desayuno y que ninguna familia no tenga qué servir en la mesa. Que ningún banquero tenga tanto poder para decidir por nuestros gobernantes y que ninguna ley sea tan inhumana como para permitir que una familia se quede en la calle.

Que nadie pierda la fe en que juntos podemos más y mejor. Que seamos conscientes de que debemos cuidar del planeta y que no hay razón que valga para que causemos sufrimiento a los animales.

Que en el 2016 recuperemos un poco más de humanidad y que nunca, nunca dejemos de soñar.